Durante toda mi niñez-adolescencia he viajado Linares - Almería, Almería-Linares. Mis padres paraban en Alcudia (Granada) para comprar pericones, tortas de chicharrones, las tortas gigantescas de chocolate, los roscos de manteca (siguiente receta) y los roscos de naranja. Aunque aún siguen haciéndolos y vendiéndolos.... ya no es lo mismo, antes se pasabas por la misma puerta de las panaderías y ahora tienes que desviarte varios kilómetros. Una amiga me dió esta receta y tenía muchas ganas de probarla para saber si eran los mismos.... y... cuando los probé es como si volviera a estar metida en ese 850 que nos llevaba de vacaciones o que nos hacía volver a la realidad del cole y la rutina.
Tienen el mismo sabor que se compraban allí...
3 huevos
125 gramos de zumo de naranja
125 gramos de aceite de oliva frito
250 gramos de azúcar
750 gramos de harina de fuerza
1 cucharadita de bicarbonato
Yema de huevo para pintarlos
Antes de iniciar la receta es importante freír el aceite, lo podemos hacer con un poco de cáscara de naranja o un poco de pan. Dejamos enfriar totalmente antes de usar.
Batimos los huevos y añadimos el zumo de naranja, el aceite y
seguimos batiendo. A continuación incorporamos el azúcar, la harina y
por último el bicarbonato. Amasamos bien para que quede todo muy bien integrado.
Tomamos pequeñas porciones y formamos los roscos y pintamos con yema de
huevo por encima. Horneamos durante unos 30-40 minutos aproximadamente,
va a depender de vuestro horno. Es importante que queden doraditos.
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